CUARTA ETAPA

Buenas tardes:

Sahagún - Ponferrada

Kilometros 158

Tiempo empleado 6 horas 17 minutos

Media de 25,01 km/h

Y van cuatro. Cuatro días de estupendo ciclismo. Ah! por cierto... seguimos sin mojarnos. Temperatura agradable y brisa leve. Nos hemos levantado en Sahagún todavía saboreando la increible cena que nos fue ofrecida la noche previa en Casa Barrunta en la población de San Nicolás del Real Camino. No damos más datos de la cena, creemos que se merece una crónica aparte dada su calidad. 

Siguiendo nuestro horario habitual a las diez de la mañana estabamos poniendo en marcha nuestra andadura en esta etapa, que podría calificarse como la reina de este Camino de Santiago 2010.



En la puerta del Hostal de Sahagún



El inicio de la etapa ha estado marcado por un acertado cambio de recorrido para evitar kilometros de aburrida autovía. Lo hemos conseguido y además disfrutando de unos tramos de autentica clásica del norte. Caminos con tierra en la que ha habido que sacar a relucir nuestras habilidades bicicleteriles.

Seguimos circulando con nuestro sistema patentado de relevos a kilometro, y disfrutando en gran parte del recorrido de un trayecto paralelo al camino que se realiza a pie. Cada kilometro que pasa nos encontramos con más peregrinos andarines, y también con otro tipo de peregrinos con carros. En esta primera parte hasta el almuerzo hemos mantenido voto de silencio y no hemos hablado nada, nada, nada.  Seriotes y meditando sobre lo divino y lo humano en nuestro Camino.

Relevitos y junto al Camino

Otra forma de hacer el Camino

Tras realizar los primeros cien kilometros hemos parado a reponer fuerzas en Astorga. Magnifica terraza en la que siguiendo los consejos de nuestro nutricionista hemos repuesto fuerzas para afrontar la parte más complicada de este etapa: La subida a la cruz de hierro.

Terracita en Astorga

Volvemos a la dieta ciclista... ¿o no?

Saliendo de Astorga nos metemos en un tipo de carretera totalmente diferente: Nada de tráfico, estrecha y "botosa" (Pedro Delgado dixit). Preludio de lo que nos espera es que nos vamos encontrando con diferentes cacharricos que tenemos que subir.

El grupo afronta compacto un "cacharrico"

Justo en esos momentos de aproximación a la Cruz de Hierro tiene lugar el momento cumbre de la jornada: El grupo se divide, por delante en franca ventaja Carmelico, Mariano y Juan.  Estaban montando su estrategia de ataque a la Cruz de Hierro. ¿Que pasa entonces? Algo normal; en un recorrido de casi 900 kilometros si no conoces el terreno es fácil perderse. Es justo lo que ha pasado: El trio de cabeza se ha perdido y ha sido obsequiado con unos 6 kilometros adicionales en los que según sus palabras había "de propina" una autentica pared en una carretera "totalmente pestosa".

Los "escapaos"

Los "astuticos"

Con esto hemos llegado a Rabanal del Camino donde nos hemos agrupado de  nuevo antes de la autentica subida a la Cruz de Hierro. En los documentos gráficos podemos observar las caras de los protagonistas de la anecdota de la jornada. También vemos la tranquilidad de los "esperadores" en el Albergue del Pilar de Rabanal donde bien pertrechados con unas cervezas hemos tenido la paciencia necesaria para esperarles.

Juan se reía

Serafo pidiendo explicaciones a Carmelo

Albergue El Pilar

Carmelo a su llegada después del cacharrico



Mariano también se reía



Afrontamos la Cruz de Hierro, bonita subida con unas buenas rampas al final. En la cumbre hemos dejado, como manda la tradición una piedra testigo de nuestro paso.  Una piedra que en este caso tenía un significado adicional en recuerdo de nuestro amigo Vicente Pla que hace un año nos dejaba a todos. Va por tí Vicen.

Rampa final de la Cruz de Hierro... las espadas en todo lo alto

La grupeta a pie de la Cruz de Hierro

Padre e hijo en el Camino

Un momento especial a pie de la Cruz

El letrado y El Aguelico han subido hermanados

Paisaje espectacular al inicio del descenso del Acebo

El grupo en Manjarín visitando a quien se autodefine como el último caballero Templario (es de Mallén)