DE RONDE VAN VLAANDEREN PARA CANCELLARA

Contábamos en este blog hace un par de días que la edición de este año del tour de Flandes podía ser cosa de dos. Cancellara o Sagan. Y tanto que fue así. Lucha de los dos favoritos codo a codo, Cancellara que destroza a Sagan en el último muro y cabalgada en solitario del suizo hasta meta. Fin. Cancellara gana.

Lo cierto es que nos parece peor el nuevo recorrido de este tour de Flandes. El año pasado la organización diseñó un final en un circuito al que se dan tres vueltas. En este circuito han montado vallas, gradas para el público que previo pago ve pasar tres veces la carrera y han incluido dos duros muros, el Oude Kwaremont y el Paterberg, que en teoría aportan mucha dureza a esos últimos 40 km. En la práctica no es así. La carrera se bloquea hasta la última vuelta donde el selecto grupo de favoritos se juega el triunfo a tope en esos dos muros. Personalmente preferíamos ver subir el Kapelmuur con muchos kilómetros en las piernas y los ataques desde el Bosberg a meta del recorrido antiguo.

Segunda Ronde van Vlaanderen para el suizo.

Este año todo ha quedado reducido a esa última vuelta. Bueno es cierto que esto es simplificar. Decir que todo se juega en 15 km, cuando la media de toda la carrera es de 42 km/h en 256 km es ser poco justo. Hay que aguantar esa media, con carreteras estrechas y muros, para poder estar en esos últimos y definitivos kilómetros. Pero bueno, se llegó a esa última vuelta, Cancellara subió el Kwaremont como si de una cronoescalada se tratase, sólo Sagan le aguantó la rueda. En la cima absorvieron a Roedlandts, el belga muy listo iba por delante, y se dirigieron a toda velocidad al Paterberg. En esos kilómetros planos se vió que Sagan es muy bueno físicamente, pero malo tácticamente (o quizá simplemente pensó que iba mejor de lo que iba y pecó de orgullo), ya que relevó a Cancellara, dando oxigeno al suizo que después en una subida meteórica al Paterberg dejó en los últimos 40 metros "destripado" a Sagan y se dirigió en solitario hacia la meta en Oudenaarde en una de sus típicas cabalgadas triunfales. Un dato: Cancellara recorrió esos últimos 13 km en escasos 16 minutos a una media de... ¡49,5 km/h!. Por detrás Sagan y Roedlandts aguantaron escapados delante de lo que quedaba del grupo. Sagan cumpliendo el guión hizo segundo, Roedlandts encantadó subió al tercer puesto del cajón. Y en el sprint del grupo el noruego Kristoff se impuso para hacer cuarto.

Y Sagan, 23 añitos, no podía pasar desapercibido posteriormente. El otro día yo dudaba de si eran apropiadas esas celebraciones especiales que hace el muchacho, de si el ciclismo necesitaba esto. Hoy lo tengo claro. Este chico es tan bueno en bici como tonto en la vida real. En el podium, mientras se entregaba el trofeo al ganador no tuvo otra ocurrencia que tocarle el culo a una azafata. ¡Toma ya!. Tengo claro que esto no me gusta verlo en nuestro deporte. Una imagen vale más que mil palabras.

Gafas de ciclista 100€. Equipaje profesional de Cannondale 200€. Tocarle el culo a una rubia en el podium del Tour de Flandes... no tiene precio.

Y que conste que no me asusto por puritano, feminista ni nada por el estilo. "El bicho" tiene 23 años, la testosterona se le supone por las nubes y la azafata en cuestión es muy atractiva. Simplemente es una cuestión de respeto; a la mujer, al ganador, al deporte y al escenario en el que tiene lugar la escena.