FIN DE FIESTA PRIMAVERAL

Y se acabaron las clásicas de Primavera. ¡Y vaya final! El ciclista belga-valón Philippe Gilbert (Verviers, 1982) completa un extraordinario hat-trick que dirían los futboleros y se adjudica el "Tríptico de las Ardenas". Amstel Gold Race, Flecha Valona y Lieja-Bastogne-Liega. Vaya semanita la del belga. Anteriormente sólo el italiano Davide Rebellin había logrado algo igual, allá por 2004. Lo de Gilbert no es ninguna sorpresa, empezo la temporada de primavera imponiéndose en la Flèche Brabançonne, y en el Tour de Flandes tras lanzar un ataque feroz en el Bosberg contó con segundos de ventaja hasta que desde el coche le dijeron que 8 segundos a falta de 6 kilómetros no eran suficientes y que había que esperar atrás. No sabemos que hubiera pasado si arriesga y se la juega.

Avisando en la Flecha BrabanÇonne (c) Bettini

Esos metros en el Bosberg no fueron suficientes (c) Bettini

Y llegó el tríptico de las Ardenas: Tres de Tres. Impresionante. En la Amstel Gold Race, carrera que los últimos años tiende a dirimirse en un sprint final cuesta arriba en el Cauberg, Gilbert no tuvo rival para reeditar su triunfo del 2010. Joaquin Rodriguez fue segundo.

Sin rival en la Amstel. Le tiene cogida la medida al Cauberg. (c) Bettini

En la Flecha Valona el equipo le trabajo a conciencia, sujetaron la carrera y se plantaron al pie de uno de los dos únicos muros llamados así en Bélgica (el otro es el Kapplemuur), el Muro de Huy. En esa pared entre casas, a mi me sigue impresionando el desnivel que se aprecia si miras los pies de la gente que está viendo la subida final, hubo dos velocidades: La de Gilbert y la de los demás. Joaquin Rodriguez, un especialista en estos finales, volvió a hacer segundo. Gilbert se recreó en la llegada. Fue sobrado.

Esfuerzo final en el Muro de Huy (c) Bettini

Y cerró en la Lieja-Bastogna-Liega, la Decana de las clásicas. El propio Gilbert confesó que estaba nervioso durante la prueba, que todo el mundo estaba pendiente de él, y que era la prueba que más ilusión le hacia conseguir. Era "su triunfo soñado". No decepcionó. Esta vez los hermanos Schleck fueron testigos del roto que les hizo en la recta de meta. Antes en la cota de San Nicolás ya les había dado un "meneo" para que no se les pasara por la cabeza nada raro. Les acompaño a meta, trabajo más Andy pero Lucas, perdón Frank, no pudo hacer nada contra el belga.

¿Que vais muy lejos o que? ¿Y decís que sois hermanos? (c) Bettini

Vencedor en Lieja, su sueño conseguido (c) Bettini

Pues nada, se acabaron las clásicas. Ahora empezaran las grandes vueltas. Para nosotros los mortales se acercan las cicloturistas de Mayo. Cada uno tenemos nuestros objetivos (aunque más modestos).